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mención honorífica

Bueno, no me gané ni un libro pero sí una mención honorífica en el concurso de cuarto aniversario de Alberto Chimal, quizá no debería celebrar pero de todos modos los haré. Y mientras sigo trabajando unso poemas domésticos para otro concurso, les dejo este cuentito, ganador de la mención honorífica, el cual, por cierto, publiqué la semana pasada en Idiosigracia y se puede leer en el número 84 del concurso de octubre de www.lashistorias.com.mx
Buen día a todos.

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INGENIERÍA DE LAS CAÍDAS / BALANZA DIGITAL

1. Ocho personas con destino al octavo piso fueron a dar (en pedazos) directo al sótano; expresiones de horror congeladas en sus rostros; y mordidas (de rata, consignaban las autopsias) por todo el cuerpo.

2. Los peritos determinaron que aquello había ocurrido por exceder el peso indicado: 369 kilogramos fue más de lo que el mecanismo pudo soportar.

3. Aún así, se preguntaban por qué razón habrían fallado todos los dispositivos de seguridad: las pinzas aferradas a las guías, el freno electromagnético, los pistones en los cilindros, el conmutador terminal…

4. La empresa (socialmente responsable, cómo no) determinó añadir una balanza digital entre los demás dispositivos del nuevo elevador; sus lecturas advertirían a los ocupantes, justo en una pantalla arriba de los botones, a cuántos kilos se hallaban de su desenlace.

5. Detestaba subir a su oficina en el ascensor, sobre todo después del accidente. Desde entonces debía lidiar con su peso exacto cada vez que subía ella sola en aquella báscula cúbica. Y más odioso le resultaba que sus kilos se multiplicaran mientras la máquina estaba en funcionamiento (maldita mecánica, pensaba, maldita gravitación). A veces esperaba a que alguien más acompañara su ascenso, para no verse agredida (un día tras otro) por ese cruel recordatorio corporativo, que anteponía (hazme favor) su seguridad a su autoestima. Por eso se alegró el día en que, precedida por cuatro personas y seguida por tres, no tuvo que enterarse. Sus kilos se mezclaron en la pantalla con los del resto de sus acompañantes. 341 kilogramos. Compartidos. Anónimos.

6. El peritaje arrojaría los mismos resultados: ocho personas, octavo piso: un siniestro idéntico al anterior.

7. Su visión se estrechaba lentamente con su propia sangre.

8. Unos pequeños ingenieros de horrendas narices (8), encapuchados que miraban fijamente a los sobrevivientes como si los estudiaran (5), mostraron sus hileras de dientes de navaja (3) mientras asían pedazos de cable entre sus garras.



disfruta el sueño...

Comentarios

  1. Hola, Rafa. Si te sirve de algo, me parece que el cuento puede dar para algo más extenso; la idea de esa red de incisos, con sus diversas sugerencias, es excelente.

    Saludos...

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  2. JE, ciertamente estataría bien... se podría proceder más despacio para que tuviera más sabory para eliminar el tono sangriento (mucha sangre para mi gusto) y darle otro un poco más irónico, sobre todo la parte de los gremlins y los traumas alimenticios de la personaje...

    Saludos.

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  3. Colega, tu cuentito éste me pareció horrible. No malo: horrible. Nomás eso de "maldita gravitación" no es creíble. Deja de ser usted todos tus personajes; déjelos ser ellos mismos.
    Por lo demás, felicidades por la mención honorífica, y ojalá sea una buena premonición para algo serio, a más largo plazo.
    Saludos, chief.

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  4. Pues qué cree, chief, en las últimas 3 semanas he perdido cuatro concursos literarios, hasta los estatales... así que no fue ni omen ni nada... en fin a seguirle en esto... y a ver qué pasa. saludos.

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